El templo de la antigua Villa de San Bartolomé se localiza en Barva, distrito primero de Barva, Cantón segundo de la provincia de Heredia.
Pertenece a las Temporalidades de la Arquidiócesis de San José, Inscrita en el Registro de la Propiedad, al Folio Real 24479-000.
Este inmueble fue construido a fines del siglo XIX, aproximadamente entre 1867-1891 y reviste valor arquitectónico, pues su arquitectura es Ne-Clásica.
Historia:
El templo actual de Barva es cuarto que se construye en el mismo terreno, lo cual ha contribuido para mostrar el proceso evolutivo que han tenido los templos costarricenses.
Primer Templo: La construcción del primer templo se efectuó en el Valle de Barva entre 1563 y 1575, posiblemente se edificó con una estructura portante de madera, muros de caña brava y cubierta de materiales vegetales. Las dimensiones de esta construcción fueron quizás muy grandes, pues la población de Barva en 1569 era de 500 habitantes.

Segundo Templo: Con respecto al segundo templo, data de la segunda mitad del siglo XVII, e inicios del siglo XVIII, porque no es sino entre 1681 y 1693 que por orden del Gobernador Miguel Gómez de Lara, se comienzan a construir templos de adobes en varias poblaciones, se incluye en ellas a San Bartolomé de Barva. No obstante, ya hacia 1659 existen documentos en los que se menciona la existencia de un convento en Barva; precisamente hacia 1712 ya la Orden Tercera de San Francisco posee una enorme jurisdicción que llega hasta Alajuela. Por tanto, es aceptable suponer que las dimensiones de este templo eran bastante amplias, hasta pudo haber tenido una capilla de Terciarios (el que profesa la regla de la tercera orden de San Francisco). Se menciona que este templo era muy similar al de Orosi en Cartago, pues lo han descrito con mucho espacio en su coro alto, sacristía, diferentes piezas, oficina y claustro cercado por tapias formando una especie de convento y toda su factura o tecnología era de adobes y teja. Esta edificación fue demolida en 1772 a causa de los daños que sufrió por terremotos del 15 de febrero.
Tercer Templo: En cuanto al templo tercero, este estuvo ubicado al costado noroeste del último y actual templo. Un terremoto lo dejó en ruinas y se demolió en 1888. Según estudios realizados parece que esta edificación era de calicanto; empero, persisten algunas dudas en cuanto a que también pudo haberse construido con adobes, porque de acuerdo con una descripción que del mismo existe se indica que era un templo de pequeña estatura, que en forma alargada se extendía de este a oeste, tenía cúpulas cuadrangulares y gruesas paredes de adobes cruzadas con tejido de cañas; además cubierta de tejas de barro y pavimento de ladrillo rojo preparado en arcilla cocida.
Actual Templo:
En relación con el actual templo, el empeño y el esfuerzo de los pobladores barveños lograron levantarlo y se preocuparon mucho más por ello, pues ya desde el 25 de setiembre de 1793, el obispo Juan Félix de Villegas había decretado la erección de la Parroquia de San Bartolomé de Barva.
El 8 de febrero de 1867, es la ocasión en la que el Obispo Anselmo Llorente y Lafuente colocó la primera piedra para el inicio de los trabajos de construcción del nuevo templo. En ese momento el cura párroco era Ramón Isidro Cabezas Alfaro (1854-1872) y entre él y el Jefe Político don Cleto González Víquez se propusieron edificar un nuevo templo y al propósito se unió el vecindario, aun cuando el mayor problema consistía en la escasez de recursos económicos. Sin embargo, tenían una ventaja que era de contar con la piedra necesaria en el mismo lugar en el que se iba a realizar la construcción.
Tomada la decisión, se seleccionó la misma manzana en que estuvo el antiguo templo y en un espacio en el que anteriormente se encontraba un cementerio.
Iniciada la obra, hubo que enfrentarse con algunos contratiempos, en especial la enfermedad del Padre Cabezas, quien fue sustituido por el cura Miguel Alvarado Umaña, que estuvo a cargo de la parroquia entre 1870-1875 y 1879-1899. Así este sacerdote continuó la obra iniciada y se dedicó a conseguir toda la ayuda económica, inclusive hasta acompañaba a los boyeros en el acarreo de las piedras y tablones para la construcción. Los trabajos estuvieron a cargo del albañil Manuel Rojas.
En 1891, el 10 y 11 de agosto se consagró el nuevo templo por intermedio del Obispo Bernardo Augusto Thiel. Además, se decidió que el patrono y jefe del templo volvería a ser San Bartolomé, ya que según las crónicas, a raíz del sismo de 1888 esta imagen cayó desde lo alto del altar (antiguo templo) quedando de frente sin que sufriera mayores daños, mientras que la de la Virgen de la Asunción quedó de espaldas en su sitial de honor.
Después de mucho sacrificio y esfuerzo el pueblo barveño contaba con un nuevo templo que mide 52 metros de largo por 18 metros de ancho, con tres naves sostenidas por dieciocho columnas de madera de estilo romano y una sacristía y una capilla de 10 por 8 metros cada una. Posee también un extenso coro, un Altar Mayor que fue construido por Sixto Umaña y donado por Santiago Córdoba. Incluye además tres altares de madera (que aún existen) tallados a mano que datan de la época colonial.
El pulpito fue tallado por Dolores Arguedas, actualmente ya no existe, porque fue destruido por personas ignorantes del valor del patrimonio cultural. El piso es de mosaico y fue traído de Roma por el presbítero Alvarado y lo colocó el albañil italiano Alfonso Solé quien en ese entonces residía en Barva.
En cuando al Sagrario que posee el templo fue donado por Josefa Calvo Andrade en 1879 al igual que las campanas de bronce, las cuales se importaron de Londres y fueron un obsequio del padre Ramón Isidro Cabezas en 1872. También destaca entre sus posesiones un sepulcro tallado por Misael Solís, artesano de Zarcero (Alajuela), el cual fue adquirido en 1965 mediante contribuciones voluntarias de los vecinos de la comunidad.
Después de concluido este edificio, el mismo no fue la excepción a las calamidades de la naturaleza, porque el terremoto acaecido en 1910 daño severamente las torres, lo cual obligó a su demolición. Años después hacia 1922, siendo cura párroco Joaquín González Zamora se inició la reconstrucción de las torres, que se edificaron con concreto armado bajo la dirección del arquitecto Ricardo Rovira y su inauguración se realizó el 10 de febrero de 1924.
Arquitectura:
Esta iglesia es piedra de cantera labrada, unidas con mortero de cal con un ancho aproximado de 1.20m, excepto el muro de la fachada principal.
El área de construcción de este templo es de 52 x 18, incluyendo sus dos capillas o sacristías que miden 10 x 8 metros.
Este templo tiene una planta en forma de cruz egipcia, distribuida en tres naves, una central con bóveda de cañón a lo largo hasta el presbiterio y dos laterales. Posee dos capillas a manera de crucero y que sobresalen del cuerpo de las naves en la planta.

El piso es de mosaico y exclusivamente fue traído de Italia a mediados del siglo pasado para este templo. Los mosaicos son de varios colores, rojo, café, negro, verde y amarillo ocre.
El presbiterio o área del altar mayor al este de la planta, se ubica en un nivel superior que el esto del templo y se divide por cinco escalones construido en piedra tallada.
Referencias:
Licenciada Ana Patricia Pacheco Ureña, Historiadora del Centro de Investigación y Conservación del Patrimonio Cultural.
Fotografías de Maritza Cartín.
Fotografías varias de Internet.