En la esquina noreste del antiguo Cuartel Bellavista, se encuentran dos viejas casas que albergaron en su día, a los comandantes de plaza y a sus respectivas familias. Fueron construidas entre finales del siglo XIX y principios del XX. En el transcurso de estos años fueron ocupadas para diversos fines y su arquitectura original fue intervenida en múltiples ocasiones.
Plaza de la Libertad (Fotografía de Maritza Cartín E., 2023)
El Tribunal Supremo de Elecciones de Costa Rica es el órgano supremo electoral de la República de Costa Rica. Fue creado en 1949, cuando se promulgó la actual Constitución Política de esta nación centroamericana. El Tribunal es el órgano constitucional superior en materia electoral y por lo tanto responsable de la organización, dirección y vigilancia de los actos relativos al sufragio.
Por reforma de la Constitución Política el 5 de junio de 1975, se le otorgó al Tribunal Supremo de Elecciones el mismo rango e independencia de los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial de Costa Rica, por lo que la institución es considerada, en la práctica, como un «cuarto poder de la República», a pesar de que en la teoría no se le considere como tal.
Costado Este sobre Calle 15 (Fotografía de Maritza Cartín E.)
Historia:
Orígenes Fue con la Constitución de Cádiz de 1812 que el país se organizó electoralmente al realizarse las primeras elecciones en Costa Rica, siendo electo el padre Florencio del Castillo, quien fue después el representante en las Cortes de Cádiz. En el año 1821 llegó la comunicación de la Independencia, esto permitió que fuera más sencillo incorporarse al primer Estatuto Político llamado Pacto de Concordia o Pacto Social Fundamental Interino el 1 de diciembre de 1821.
Costado Este (Fotografía de Maritza Cartín E.)
Edificio del Tribunal Supremo de Elecciones:
El edificio del Tribunal Supremo de Elecciones ocupa un lugar destacado en los alrededores del Parque Nacional. La topografía quebrada del terreno obligó a realizar un diseño escalonado, desde donde se puede admirar el centro de la ciudad.
El diseñador de la obra, Jorge Bertheau, partió de una estructura de plataformas escalonadas que había sido construida como base para un edificio de forma piramidal destinado a ser la casa presidencial. La obra fue interrumpida por falta de presupuesto, en medio de la crisis económica de principios de la década de 1980.
Costado Sur del Tribunal Supremo de Elecciones
Jorge Bertheau, Arquitecto.
Presenta rasgos de estilos históricos, columnas clásicas, molduras, cornisas y arcos adosados a los muros de la fachada, por lo que se lo cataloga como perteneciente a la corriente estilística llamada posmodernismo. Un hemiciclo formado por columnas clásicas atraviesa la esquina que se encuentra diagonal a la Biblioteca nacional y frente a la esquina sureste del Centro Nacional de Cultura.
CUANDO el famoso crac financiero de 1929, que arruinó a muchas gentes, el Doctor Fernando Quirós Madrigal, médico alienista, debido a varias circunstancias, dejó de recibir la mesada que el Gobierno de Costa Rica le remitía a Alemania para que atendiera al pago de su pensión y de sus estudios profesionales. Desesperado, nervioso, el Doctor dispuso invertir los pocos dineros que le quedaban en comprar billetes de lotería. Había que asomarse a la suerte por la única ventana abierta que es la lotería.
Una tarde, en un café, el Doctor Quirós se dio a la tarea de curiosear los billetes que había comprado; deseaba cerciorarse cuáles eran los premios en efectivo y a cuánto montaban. Pero cuál no sería la sorpresa al ver que el primer premio consistía en un hermoso caballo de raza fina y de carrera…
Uno de sus compañeros, estudiante también, al ver la cara de tristeza que puso el médico alienista al terminar de leer el plan del sorteo de la lotería, le pregunta:
—”¿Qué te pasa, Fernando, que estás poniendo una cara tristona?”.
Y el Doctor Quirós Madrigal no tardó en contestar:
—”Nada, hijo. Que si pegamos el “gordo”, o le pedimos una beca al Gobierno de Costa Rica, O TENDREMOS QUE COMERNOS EL CABALLO”
Hace más de cien años este hermoso inmueble era parte de una finca cafetalera ubicada en Barrio Socorro en Santo Domingo de Heredia y le pertenecía a una familia de apellido Zamora. No se sabe el motivo, pero ellos tomaron la decisión de vender su hacienda, siendo así adquirida por la familia Tournón. Seguir leyendo Casa Antigua, Café y Restaurante→
Un viajecito a la bellísima tierra de Llano Grande de Cartago. Cómo vivo en Guadalupe de Goicoechea decidimos mi esposo y yo hacer el viaje subiendo hacia Rancho Redondo y así hacer un viaje diferente. Hermoso paisaje y la carretera en muy buen estado.
Pasamos almorzar a un pequeño pero bello restaurante llamado Flores y Café, por cierto deliciosa comida y atención.
EN tiempos del Gobierno del General don Tomás Guardia, arribó a nuestras playas un general sudamericano. La sociedad costarricense y el gobierno, se apresuraron a agasajar y a tributarle honores al distinguido visitante.
Un día, entre el coro de amigos, el militar hizo estas consideraciones:
—”Tengo un muchacho de dieciocho años que está completando el ciclo de su educación inglesa. Luego pasará a Francia para que tome algo del refinamiento francés. Después irá a la Madre Patria donde hará estudios profesionales, y cuando tenga 28 ó 29 años, lo traeré a Costa Rica”.
Uno de sus amigos lo interrogó:
—”General, ¿la intención es simplemente de paseo?”. A lo que el huésped, contestó:
—”No señores, es para que aquí corone sus estudios”.
La sorpresa de los circundantes fue grande. Le manifestaron al pundonoroso militar que aquí no había universidad ni nada en qué perfeccionar los estudios de un muchacho que venía de los principales centros de la civilización.
Una sonora carcajada se dejó oír, y luego la voz del General don Tomás Guardia, allí presente, que decía:
MAX JIMENEZ HUETE fue de los primeros en revolucionar en Costa Rica la poesía.
Aparte de ser Max Jiménez Huete un hombre de gran fortuna, fué también un bohemio elegante. Su mayor satisfacción era reunir a sus amigos y agasajarlos espléndidamente. Viajó por toda Europa y América. París, Viena, New York, La Habana, fueron asiento de sus exposiciones de arte pictórico.
Una noche, en el Círculo de Amigos del Arte, el poeta se encontraba reunido con varios de sus amigos. La reunión se animaba como era natural, se conversaba de todo lo relacionado con el arte y la literatura.
El lírica ramonense Rafael Estrada, ya fallecido, muy amargado y decepcionado, se quejaba de la indiferencia del costarricense por todo lo que fuera arte y literatura. Se dolía del poco estímulo para con los valores nacionales.
Entonces, el poeta Jiménez Huete, dándole la razón a su compañero Estrada, tuvo una de sus más inteligentes e ingeniosas salidas, que le mereció el aplauso de todos.
Con aquella ironía conque hablaba para criticar, y con aquella voz de trueno que se gastaba, dijo:
—«El costarricense, señores, ES AGUILA EN EL NORTE, CONDOR EN EL SUR Y ZOPILOTE EN COSTA RICA»…
“ El Tranvía de Cartago ”
A los finales del siglo, muchas ciudades se modernizaban con el moderno sistema de trenes de corta duración. Fue tan extraordinario que de los trenes grandes que conectaban las ciudades se pasaron a los pasajes cortos dentro de la ciudad que se llamaban tranvías.
En 1886 el inglés Silas Wright Hastings gana la licitación para construir la línea en la ciudad de Cartago. En el año 1888 se inaugura la primera línea de trenes inter urbano de Costa Rica. Estos vagones eran operados por una pequeña locomotora de vapor. ¡Eran de las pocas tranvías trabajando en todas las Américas! Seguir leyendo El primer balneario de Costa Rica…Agua Caliente de Cartago→
En su época fue vista con burla y menosprecio, fue la comidilla de la sociedad, sin embargo debió ser una mujer muy bella, de porte elegante, femenina e inteligente para enamorar a un hombre de la talla de Don Ricardo Jiménez Oreamuno. Se trata de Doña Beatriz Zamora López, Primera Dama de la República desde 1932 a 1933, a quienes todos llamaron La Cucaracha. Seguir leyendo Una dama llamada «Cucaracha»→
Manuel Antonio Chapuí de Torres nació en 1710 en Curridabat, hijo de Josefa de Torres y el inmigrante genovés Manuel Chapuí. Su madre casó en segundas nupcias con el capitán José Francisco de Bonilla, de quien heredó el enorme latifundio que después sería la ciudad de San José.
Chapui quedó huérfano de padre a temprana edad, marchando a León de Nicaragua y a Guatemala para convertirse en sacerdote, ingresando a la Orden de San Felipe Nery.
El padre Chapuí fue el primer cura deVillanueva, de 1772 a 1782. En su Testamento donó toda su herencia a la comunidad pobre de San José, la cual abarcaba los terrenos que desde la Sabana hasta San Pedro de Montes de Oca.
Con la llegada de los españoles y el proceso de conquista y colonización se estableció un nuevo ordenamiento espacial, político, económico, cultural y social; además, se impuso un sistema monetario con monedas fabricadas en oro, plata y en menor medida, en cobre. Costa Rica, al no tener explotación de metales preciosos ni casa de fabricación de moneda, la poca que circulaba ingresaba gracias al comercio con otras colonias del Imperio Español; entonces se negociaba con productos como víveres, cerdos, bizcocho, cebo, cuero, cacao, tabaco y ganado, así como por el pago que recibían los funcionarios civiles y eclesiásticos. Ante la escasez de moneda en este período, también se utilizó el trueque para las transacciones y, a partir de 1709 y hasta finales del siglo XVIII, el cacao -oficialmente-como moneda.
Referencias:
Visita al Museo del Banco Central de C.R. (Agosto, 2018)
Pintura del Maestro Povedano sobre la leyenda de Dulcehe.
Fué en el cumplimiento de esta promesa donde ocurrió ese episodio de leyenda, el rescate de la hermosa Dulcehe, que el hábil pincel de! Maestro Povedano ha recogido, para enriquecer con su cuadro admirable no sólo nuestro escaso acervo artístico sino también el tesoro de nuestra tradición. colonial, al dar con su inspiración nueva vida a aquella escena, ciertamente digna de la magnanimidad de Vázquez de Coronado. Oportuno -es recordarlo pues que, como ha dicho Unamuno, la historia no es sólo la letra, el documento escrito, sino también la leyenda que recogiendo los hechos los embellece con un suave encanto y matiza su aridez con los amables tintes del ensueño. Seguir leyendo La Leyenda de la Princesa Dulcehe.→
Las mujeres «indias» (indígenas) se han representado en dos ocasiones en las monedas de Costa Rica, aunque más como figuras alegóricas de la República y de la libertad que con la finalidad de revindicar a las poblaciones autóctonas. Estas figuras femeninas se insertaron dentro del proceso del cambio del sistema político de Costa Rica de Estado a República, entre 1847 y 1848 y probablemente, se incluyeron, también, con la intención de identificar el territorio de Costa Rica con un origen bastante antiguo al igual que las repúblicas europeas, aún anterior a la dominación española.
Esta condición era necesaria para reforzar la soberanía de la nueva República y su capacidad para establecer tratados de amistad y comercio con las grandes potencias del momento, especialmente con Gran Bretaña.
La Primera Representación de una India en las Monedas de Costa Rica:
Las «Mariquitas».
En 1847 se emitió la primera moneda conmemorativa de Costa Rica para celebrar las reformas de 1846 (el golpe de Estado a José Rafael Gallegos, ocurrido el 7 de junio) y la nueva Constitución de 1847, sobre la cual se proclamaría en 1848, la República. De acuerdo con el decreto que dio origen a esta emisión, en el reverso de la moneda se grabó «el rostro de una joven india». Estas monedas se emitieron también en 1849 y en 1850, pero se les cambió la leyenda conmemorativa por «República de Costa Rica», para ajustarse a las nuevas circunstancias políticas de la proclamación de la República en 1848.
Moneda de un real de plata, 1849. Grabado de figura de una joven india.
La figura de la joven india grabada en las monedas contiene elementos que asemejan a modelos artísticos europeos, ya que la posición de las manos y la forma del rebozo dan la idea una madre con un niño en brazos, que también podría interpretarse como el nacimiento de la República. El diseño la hace semejante a representaciones renancentistas de la Virgen María, razón por la cual posiblemente, el pueblo la llamó Mariquita. También se asemeja a la pintura de Rafael Sanzio 81483-1520) conocida como La Fornarina (ca.1520).
La primera moneda que se fabricó en Costa Rica es conocida por los coleccionistas como la moneda de la “palmera”. Es de oro de 21 quilates y se acuñó en 1825, en una casa de moneda provisional llamada Ingenio Los Horcones, ubicada en la actual provincia de Alajuela. En ese tiempo, Costa Rica estaba unida a otros países de Centroamérica como parte de una República Federal, por lo que, en el anverso de esta moneda, aparece el escudo de la Federación; por el reverso, debía tener un árbol frondoso como símbolo de la unión de los países pero, en lugar de dicho árbol, Costa Rica acuñó la imagen de una palmera, de modo que las monedas fueron desautorizadas y destruidas en 1831. Algunas permanecieron y, actualmente, se sabe que existen cinco de ellas en todo el mundo. Por su rareza, por su valor histórico y por haber sido elaborada con oro de Costa Rica, es considerada una de las monedas mas valiosas de la colección del Banco Central de Costa Rica.
En 1941 salió a circulación el billete de dos colones del Banco Nacional de Costa Rica, Serie E, en cuyo reverso está grabada una imagen basada en una pintura al óleo del artista español Tomás Povedano (1847-1943) llamada El rescate de Dulcehe. En esta obra se muestra un acontecimiento sucedido en la década de 1560 donde el conquistador español, Juan Vásquez de Coronado, rescata a la «princesa indígena, Dulcehe.»
En la obra de Povedano se representa a Dulcehe con modelos artísticos europeos del neoclasicismo y romanticismo, alejándose de la imagen real de la mujer indígena autóctona costarricense.
Oleo El Rescate de Dulcehe del artista español Tomás Povedano (1847-1943)